Deportes en tiempos de COVID-19

 

 

La pandemia ocasionada por el virus COVID-19 junto sus medidas de precaución y prevención, han derivado en la suspensión, cancelación y postergación de muchas de las ligas y competencias deportivas  alrededor del mundo. Pero ¿Sabías que esto puede generar más pérdidas, además de las económicas?

En cualquier giro deportivo, la disciplina y consistencia de un deportista profesional, son la base del trabajo que los ayuda a alcanzar, a poderse mantener en un alto nivel y tener un rendimiento óptimo como atletas.

En el caso del fútbol soccer, por un ejemplo, muchos deportistas optan por hacer rutinas de alto rendimiento, para no perder la forma y condición que se necesitan para ser un profesional, y en muchos casos, recurren a entrenadores personales. Y ahora, considerando las medidas tomadas debido a la pandemia, todo lo que necesitan en casa para intentar mantenerse al nivel en el  que se encontraban antes de las suspensiones.

El problema con esto es que, invariablemente, se pierde ritmo y concentración: jugar un partido cada semana, entrenar y practicar con esa regularidad, son situaciones muy distintas al hecho de tener que pausarlo o dejarlo todo,  y retomar estas actividades 2 o 3 meses después,  sin haber pisado el campo de juego ni entrenado con los compañeros.

Esto, es fácil de confirmar por cualquier deportista, especialmente quienes han pasado por lesiones y convalecencias, debiendo alejarse de su actividad y entrenamiento. Retomar el ritmo de juego, a pesar de mantener una excelente condición física, siempre muestra efectos en los desempeños físicos, mentales y emocionales de los atletas. Independientemente de si regresan con menos ánimo o con más, hay una curva: una necesidad de volver a medir la cancha, volverse a sentir cómodo en ella.

En otro caso, también la asociación americana de Basquetbol (NBA), suspendió sus actividades deportivas de verano, así como las de búsqueda y reclutamiento de jugadores,regularmente llevadas a cabo por universidades en todo el mundo.

Tanto en el fútbol, como en el baloncesto y cualquier deporte afectado, hay formas de seguir con una excelente condición física, aunque justo como mencionamos antes, la química y estrategia de juego, probablemente se verán afectadas, en más de un jugador, en más de un equipo profesional.

Vemos que no solo el ritmo y la necesidad de practicar son fundamentales, sino que también los entrenamientos en conjunto, son positivos y necesarios para todos los deportistas que conforman un equipo, de modo que puedan conocer, recordar y aprovechar las habilidades, fortalezas y debilidades de cada uno de sus miembros, y así funcionar mejor como equipo.

En resumen, los efectos económicos  en el mundo de los deportes, a raíz de las medidas de contingencia, serán fáciles de notar y aparecerán más rápido en las conversaciones y discusiones de sobremesa, haciéndonos tomar un partido u otro.

Sin embargo, no hay que olvidar este otro lado del problema: el que ser un deportista requiere de mucha disciplina, posiblemente aún más en los meses por venir. Así como un esfuerzo para mantener un estado emocional bueno, para cuando sea requerido. Los deportistas tendrán que seguir practicando y entrenando con la misma intensidad y calidad, para así seguir demostrando, el porque la institución en la que estén, sigue confiando en ellos.